Los Azules han sellado su permanencia en Segunda B gracias a un partido en el que sería difícil destacar a un sólo protagonista. Gracias al trabajo de todos los componentes de la plantilla y el cuerpo técnico, Zornotza contará una temporada más con un equipo en la categoría de bronce del fútbol nacional.

El inicio del encuentro ha estado marcado por el contraste entre las propuestas de ambos conjuntos. Mientras el equipo madrileño intentaba imponer un ritmo de juego más pausado, los de José Félix Gallastegui han propuesto un juego donde el dinamismo y el movimiento han sido la característica principal.

Bajo esta premisa han llegado los primeros goles de la SD Amorebieta. El buen juego de los locales hacía prever que los goles llegarían pronto, siendo Moustapha el primero en avisar, pero su remate ha sido bien taponado por los zagueros fuenlabreños.

Sin embargo, poco ha podido hacer el meta visitante, a punto de llegar al cuarto de hora de juego, para detener el lanzamiento de Ibai, que tras tocar en un defensa besaba las redes de una de las porterías de Urritxe. Los locales, que querían agradecer como se merece el apoyo de su afición, han continuado enlazando buenas jugadas y gracias al juego entrelineas del propio Ibai, además de Barron y Muniozguren, han llegado nuevas ocasiones de gol.

Alain Barron y Jon Orbegozo han aprovechado las suyas y han colocado una ventaja prácticamente insalvable para el equipo madrileño, que ha visto, por un momento, como recortaban distancias debido al gol en propia puerta de Hodei. Este hecho no empaña el buen momento de forma en que ha llegado el azpeitiarra al tramo final de temporada y que hoy ha formado una pareja inexpugnable con Xabier Etxebarria.

En esta ocasión los locales no han dado margen de reacción a su rival. La seguridad de Oier, brillante en el poco trabajo que ha tenido, la seguridad y acierto a la hora de incorporarse al ataque de Iñaki Garmendia y Alberto Delgado, sumado a la labor de Moustapha y Undabarrena en la zona ancha, han hecho el resto.

Tras la reanudación, Orbegozo ha dispuesto de varias oportunidades de aumentar su cuenta pero el delantero guipuzcoano no ha estado acertado de cara a gol, si bien su trabajo y movilidad han sido vitales para el buen hacer de sus compañeros. De sus botas ha salido el centro que ha rebotado en uno de los centrales madrileños y ha supuesto el 4-1.

Con un público disfrutando de la primaveral tarde vizcaína y del buen fútbol de su equipo, los Azules han mantenido la tensión competitiva y de esta manera Moustapha, a la salida de un córner y Aitor Ortega, que ha entrado en la segunda parte, han cerrado el marcador. Desde el banquillo también han entrado Apraiz e Izaro, que han dado el relevo oportuno a sus compañeros y han mantenido la exigencia.

El trabajo llevado a cabo por Gallastegui y su equipo de trabajo ha dado sus frutos y hoy ha tenido su colofón con el mejor partido desde su llegada. Ha sido una temporada larga y complicada pero el equipo ha terminado disfrutando y haciendo disfrutar a su afición. Se cierra el telón de la temporada en Urritxe, pero la promesa de volver la temporada que viene es ya una realidad.

Los Azules agradeciendo a Urritxe su apoyo

FICHA TÉCNICA